Los defensores de la Moskitia sugieren un proceso de negociación pacífica entre Consejos Territoriales Indígenas para definir una convivencia de paz, de manera regulada al punto de proteger la armonía de zonas protegidas del bosque ancestral.
Líderes de los Consejos Territoriales Indígenas de la Moskitia, y la representación de las organizaciones MUSKITIA ASLA TAKANKA (MASTA) y la Unidad de los pueblos indígenas y afrodecendientes de la Muskitia Hondureña (UPINMH), se han pronunciado el día de ayer para exigir al Estado de Honduras, el cumplimiento de sus compromisos con el proceso de saneamiento de territorios indígenas con acompañamiento del Ministerio Público y Fuerzas Armadas para la protección del patrimonio medioambiental.
Los líderes indígenas de la Moskitia señalan que su tierra ancestral está enfrentando problemas y desafíos sin precedentes, como el aumento de la violencia, la ingobernabilidad y la destrucción de los bosques, sin que se tomen medidas para detenerlo.
Las organizaciones lamentan que, a pesar de los esfuerzos de los líderes indígenas y afrodescendientes, los territorios siguen siendo usurpados, con la conversión de áreas boscosas en potreros y la construcción no autorizada de carreteras que atraviesan las Reservas de Biosfera de Rio Plátano y Tawahka, facilitando la entrada de colonos y personas involucradas en la tala ilegal.
Los Consejos Territoriales Indígenas denuncian que la deforestación en sus bosques está empeorando, siendo la zona más afectada a nivel regional, con la pérdida de hasta 2,700 hectáreas de bosque cada año. En 2020, se perdieron 10,000 hectáreas en las zonas de la Laguna de Ebans, Sico Paulaya, Culmí y Wampusirpi y Warunta.
Por todo lo anterior, exigen al Gobierno de Honduras que acelere el proceso de saneamiento del territorio y que el Ministerio Público participe en la defensa del medio ambiente con el apoyo de las Fuerzas Armadas. Además, instan al Estado de Honduras y a la Cooperación Internacional a hacer un seguimiento de los casos de violencia contra los líderes indígenas que defienden el patrimonio ancestral.
En cuanto a la situación de las nuevas rutas de la carretera ilícita desde Olancho hasta Krausirpi, se han identificado ocho ramales que van hacia la zona núcleo de la Biosfera Río Plátano y atraviesan la reserva de la Biosfera Tawahka, con una extensión de más de 53 km, acompañados de actividades ilegales de tala y acaparamiento de tierras. Se sugiere que el río Aner sea un punto de control adecuado debido a la extensión de estas rutas ilícitas.
Pronunciamiento:
PRONUNCIAMIENTO MOSKITIA